El mercado de criptomonedas ofrece diversos tipos de activos, por eso antes de comenzar a invertir se vuelve fundamental conocer los distintos tipos de tokens que componen este sector de la economía. Y sí, no todas las criptodivisas funcionan de la misma manera; todas tienen características y una utilidad distinta, así como un ecosistema que le permite interactuar con otros activos.
Los tokens son unidades de valor que se crean y se usan en una red blockchain. Pueden representar diferentes cosas, como monedas, acciones, bienes, servicios, etc. Los mismos se pueden clasificar según su función, su fungibilidad y su relación con la cadena de bloques subyacente.
En este artículo conocerás los principales tipos de tokens:
Según su función
Según su función, los tokens se pueden dividir en:
- Tokens de utilidad: son tokens que permiten acceder a una plataforma o servicio específico dentro de una red blockchain.
- Tokens de seguridad: son tokens que representan un activo financiero regulado, como una acción, un bono, un fondo o una propiedad.
- Tokens de gobernanza: son tokens que otorgan derechos de voto o de decisión a los poseedores sobre el funcionamiento o el desarrollo de una red blockchain. Por ejemplo, el token UNI se usa para participar en la gobernanza del protocolo Uniswap.
- Tokens de activo: son tokens que representan un activo físico o digital, como un coche, un cuadro, un dominio o un videojuego. Por ejemplo, el token MANA se usa para comprar y vender parcelas de tierra virtual en la plataforma Decentraland.
Según su fungibilidad
Según su fungibilidad, los tokens se pueden dividir en:
- Tokens fungibles: son tokens que se pueden intercambiar entre sí sin perder su valor o identidad. Por ejemplo, el token USDT es un token fungible que representa un dólar estadounidense; un USDT es indistinguible de otro USDT, puesto que todos comparten las mismas características y valor.
- Tokens no fungibles: son tokens que no se pueden intercambiar entre sí porque tienen características únicas e irrepetibles. Un ejemplo de esto son los NFTs que representan obras digitales. Estos, a pesar de compartir la misma cadena de bloques y el mismo método de acuñación, pueden tienen un valor distinto entre sí porque representan dos activos diferentes.
Según su relación con la blockchain
Según su relación con la cadena de bloques subyacente, los tokens se pueden dividir en:
- Tokens nativos: son tokens que se crean y se usan en su propia cadena de bloques, como Bitcoin o Ethereum. Son activos que mantienen su propia infraestructura, utilizando métodos de acuñación y lenguajes de programación específicos para su ecosistema.
- Tokens derivados: son tokens que se crean y se usan en una cadena de bloques de otra criptomoneda, aprovechando la infraestructura y la seguridad de otra red. Por ejemplo, los tokens UNI, LINK y MATIC son tokens distintos, con distintas utilidades, que comparten el mismo método de acuñación y características técnicas, al ser tokens ERC-20, un estándar que se usa en la cadena de bloques de Ethereum para crear activos. Estos tokens también pueden ser almacenados en una misma dirección de billetera, y ser intercambiados en los principales swaps descentralizados.
Ventajas y desventajas de acuñar tokens
Los tokens tienen ventajas y desventajas según el tipo y el caso de uso que tengan. Algunas de las ventajas y desventajas generales son:
Pros y contras
-
Permiten la creación y el intercambio de valor de forma descentralizada, transparente y eficiente, sin intermediarios ni barreras.
-
Ofrecen una mayor diversidad y flexibilidad de opciones para los usuarios, los inversores, los desarrolladores y los emprendedores.
-
Facilitan la innovación y la experimentación de nuevos modelos de negocio, servicios y productos basados en la tecnología blockchain.
-
Están sujetos a la volatilidad, la especulación, la competencia y la incertidumbre del mercado de las criptomonedas.
-
Requieren de una regulación y una supervisión adecuadas para evitar el fraude, el lavado de dinero, la evasión fiscal y otros riesgos legales.
-
Implican un mayor nivel de responsabilidad y conocimiento por parte de los usuarios, que deben proteger sus claves privadas, sus billeteras y sus transacciones.