FTX Venderá Sus Filiales De Japón Y Europa Para Recuperar Dinero

El emblemático intercambio de criptomonedas, FTX, logró recibir un permiso legal en manos de un juez de bancarrotas de Delaware para poner a la venta cuatro unidades clave, incluido el brazo de derivados LedgerX y la plataforma de compensación de acciones Embed, junto con las unidades japonesas y europeas del exchange.

Según los informes, la decisión judicial permite que se lleven a cabo ofertas, una subasta y una audiencia de venta, con permiso para que cualquier transacción real se realice más adelante. El banco de inversión, Perella Weinberg, quien está encargado de iniciar el proceso de venta ya cuenta con 117 interesados por comprar.

El juez, John Dorsey, del Tribunal de Quiebras de Delaware, fue quien tuvo la tarea de supervisar la liquidación de la bolsa y aprobó las medidas en una orden fechada el jueves después de una audiencia celebrada el miércoles. Los avisos de venta se publicarán en aproximadamente tres días hábiles, y las indicaciones de interés se recibirán entre el 18 de enero para Embed y el 1 de febrero para FTX Europa y Japón.

FTX está tratando de levantarse

Las denuncias que se han presentado en relación a las irregularidades de ex altos ejecutivos y sus familias, se excluirán de la venta debido a las preocupaciones del departamento de Justicia.

En base a ello, FTX pretende vender rápidamente las partes de la empresa más estables desde el punto de vista financiero y fáciles de separar, para hacer que el patrimonio, bajo la dirección actual de John Ray, aumente el valor para los acreedores.

Cabe recordar que, FTX se declaró en quiebra el 11 de noviembre de 2022 en la Corte de Estados Unidos bajo el capítulo 11. Su fundador y ex director ejecutivo, Sam Bankman-Fried, ha sido acusado de diferentes cargos por la SEC por delitos financieros como fraude, lavado de dinero y violación de las leyes de campaña.

Sin embargo, Bankman-Fried se declaró inocente recientemente, mientras que dos miembros de su círculo íntimo, Caroline Ellison y Gary Wang, admitieron su culpa y están cooperando con los fiscales estadounidenses.