El lanzamiento de la red Blast Layer-2 de Ethereum está siendo recibido con entusiasmo y miedo al mismo tiempo. Los inversores retiraron casi 1.600 millones de dólares de sus depósitos iniciales en las primeras 24 horas. Tal como lo demuestran los datos de Defillama, este movimiento de fondos ha puesto de relieve los desafíos que enfrentan las nuevas plataformas para establecerse.
Rápida disminución del valor total bloqueado
Según los informes de Coingape, la red Blast contaba con un valor total bloqueado (TVL) de 2.300 millones de dólares en el momento de su lanzamiento. Sin embargo, estas cifras se redujeron a 520 millones de dólares desde que los usuarios comenzaron a retirar sus fondos de la plataforma.
Por lo tanto, la red, que se había presentado como un nuevo jugador prometedor en la comunidad Ethereum, proporcionando un rendimiento nativo de ether (ETH) sobre ETH apostado, vio su suerte cambiar dramáticamente en un día.
El atractivo inicial de Blast se debió en parte a su enfoque innovador para generar rendimiento para sus clientes. A los usuarios también se les prometieron puntos Blast al apostar su ETH, que luego podría canjearse por un lanzamiento aéreo programado para mayo. Este mecanismo de incentivos atrajo a muchos inversores deseosos de capitalizar las posibles ganancias.
Además, la red se comprometió a distribuir el 50% de su próximo airdrop a los desarrolladores, atrayendo aún más la participación de la comunidad cripto en general.
La controversia y el escepticismo de Blast
A pesar de su éxito inicial en la atracción de depósitos, Blast enfrentó el escepticismo de varios sectores del criptomundo. Los críticos establecieron paralelismos entre su puente de solo depósito y los mecanismos empleados por los esquemas piramidales, arrojando una sombra sobre su legitimidad.
Inicialmente, la controversia hizo poco para disuadir a los inversores, ya que la promesa de altos rendimientos y lanzamientos aéreos mantuvo el flujo de depósitos. Sin embargo, el rápido retiro de fondos después del lanzamiento sugiere una confianza frágil en la viabilidad a largo plazo de la red.
Esfuerzos de integración y expansión
Para asegurar su ecosistema y conservar la confianza de los inversores, Blast planea realizar integraciones con Zora y Pyth, entre otros. Estar en esta estrategia buscará mejorar su utilidad y reunir su infraestructura de desarrollo de aplicaciones descentralizadas (dApps) más funcional y sólida. Sin embargo, el efecto a largo plazo de estas integraciones en el ambiente de inversión aún no se ha establecido, ya que la red aún se encuentra en sus etapas iniciales.
Con el final del primer día, el destino del Blast está en juego. La capacidad de la red para atraer e involucrar a los usuarios y atraer nuevos depósitos decidirá si la capa 2 competirá favorablemente con sus rivales. Además, los inversores y observadores de la industria seguirán de cerca su respuesta a los desafíos de mantener la seguridad y fomentar la confianza de los usuarios.
