Durante más de 15 años la identidad del creador de Bitcoin ha permanecido como un enigma. Sin duda, se trata de uno de los misterios sin resolver más intrigantes del siglo XXI, pues su fortuna lo colocaría entre las 30 personas más ricas del mundo, según la revista Forbes. ¿Quién es realmente Satoshi Nakamoto?
En el lejano octubre de 2008, un mensaje en un foro firmado por un tal ‘Satoshi Nakamoto’ titulado “Bitcoin P2P e-cash paper” anunciaba la creación de la criptomoneda. Durante los dos años siguientes, Satoshi permaneció activo en la comunidad, comunicándose con otros en el desarrollo de la blockchain. El último mensaje de Satoshi se publicó en diciembre de 2010. Desde entonces, el fundador de BTC está totalmente desaparecido y sus Bitcoin continúan en el mismo lugar donde los dejó.
Existen cientos de teorías alrededor de la verdadera identidad de Satoshi Nakamoto. Se han realizado exhaustivas investigaciones para descubrir la identidad del creador de la primera criptomoneda de la historia. Sin embargo, los resultados han sido tan ambiguos como cuestionables.
Asimismo, es difícil saber realmente cuántos bitcoins posee Nakamoto, ya que se sospecha que podría haber utilizado diferentes direcciones al minar los primeros bloques. Sin embargo, algunos estiman que los monederos Bitcoin asociados a Nakamoto contienen aproximadamente 1,1 millones de BTC.
Dado que sólo se minarán 21 millones de Bitcoin, las tenencias de Nakamoto representan el 5% de todos los bitcoin que se crearán.
Satoshi es importante para el ecosistema Bitcoin más allá de su condición de fundador. El personaje se ha convertido en una especie de figura filosófica para los defensores de la criptomoneda. Debido a sus mensajes, el libro blanco y su manera de describir el mundo que le rodea, se ha propuesto a un puñado de individuos, ninguno de los cuales ha demostrado ser Satoshi Nakamoto. Te presentamos 8 candidatos, ¿Quién de ellos es Satoshi Nakamoto?
Probablemente hayas visto la imagen de este personaje al googlear sobre Satoshi Nakamoto. Este fue quizás el intento más sonado de revelar al fundador de Bitcoin. Dorian Prentice Nakamoto es un físico radicado en Los Ángeles, licenciado en la Politécnica de California y que trabajó en proyectos clasificados de defensa.
En marzo de 2014, el portal Newsweek identificó a Dorian como el creador de la criptomoneda. Newsweek afirmó varias similitudes entre Satoshi Nakamoto y Dorian Nakamoto. Por ejemplo, ambos tenían supuestamente inclinaciones libertarias y ascendencia japonesa. El autor del artículo también afirmaba que Dorian había dicho que “ya no” estaba involucrado en Bitcoin y que lo había “entregado” a otras personas.
El mayor error de la revista fue publicar una fotografía de la casa de Nakamoto. Una búsqueda superficial de imágenes podría revelar fácilmente su ubicación. Aunque muchos no creían que Dorian Nakamoto fuera el fundador de bitcoin, la comunidad de criptomonedas estaba horrorizada de que se hubiera violado su privacidad, según Investopedia.
Dorian Nakamoto negó posteriormente la cita y afirmó que había entendido mal la pregunta y que no tenía nada que ver con Bitcoin. Además, ha rechazado de manera agresiva haber formado parte del libro blanco de Bitcoin, y al momento de su publicación, había ‘dejado de trabajar por años’.
Sin embargo, no está demás decir que Dorian sacó provecho del circo mediático. En marzo de 2014, el empresario y ‘bitllonario’ Andreas Antonopoulos lanzó una recaudación de fondos para apoyar a Nakamoto.
La campaña de crowdfunding sirvió como disculpa por ‘el daño y las dificultades que Nakamoto experimentó durante el calvario’. Más de 2.100 seguidores donaron 102,23 bitcoin por un valor aproximado de 34.500 dólares en 2014; en febrero de 2023, valían unos 2,3 millones de dólares.
Ahora bien, si Dorian Nakamoto no era lo suficientemente sospechoso debido a su apellido, hay que añadir que también era vecino de Hal Finney, un informático, codificador y entusiasta de la criptografía, pionero en el desarrollo de BTC.
Aparte del propio Nakamoto, Finney fue supuestamente la primera persona que trabajó en la depuración y mejora del código abierto de Bitcoin. También recibió la primera transacción de Bitcoin en 2009 de manos del propio Satoshi Nakamoto.
Correos y mensajes de Hal Finney y Satoshi Nakamoto analizados por un servicio de consultoría de análisis de escritura halló similitudes en su estilo, determinando que, si bien era poco probable que Finney fuera Satoshi, podría haber sido el escritor fantasma de Nakamoto, como mínimo.
También se planteó la idea de que Finney podría haber utilizado a Dorian Nakamoto como “tapadera” para ocultar su identidad, idea presentada por el periodista de Forbes Andy Greenberg, quién llevó a cabo la investigación.
Sin embargo, Finney negó tales afirmaciones y presentó pruebas para demostrar que no era Satoshi Nakamoto. Al reunirse con Greenberg, Finney presentó los correos electrónicos que él y Nakamoto habían intercambiado a lo largo de los años, así como el historial de su cartera de Bitcoin.
Hal Finney Murió en 2014 a la edad de 58 años tras luchar contra la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) durante cinco años.
Mientras la mayoría de los sospechosos de ser Satoshi Nakamoto niegan tener participación alguna con creación de la criptomoneda, del otro lado del globo existe alguien que asegura ser el padre de Bitcoin. Ese es el caso de Craig Wright, un científico y empresario australiano.
Wright reclamó la identidad en 2016 después de que la revista Wired publicara un perfil sobre él en diciembre de 2015. La revista afirmaba que había “obtenido la prueba más sólida hasta la fecha de la verdadera identidad de Satoshi Nakamoto”.
El artículo informaba sobre la aparición de Wright a través de Skype en la Bitcoin Investor’s Conference de ese año en Las Vegas. Cuando le preguntaron por sus credenciales, Wright afirmó que era “un poco de todo”. Enumeró sus títulos, entre ellos un máster en estadística y dos doctorados. También dijo: “Llevo mucho tiempo metido en todo esto… Intento mantener la cabeza gacha”.
Las pruebas de Wired consistían en referencias a un “artículo sobre criptomoneda” en el blog de Wright que apareció meses antes de que empezara a circular el libro blanco del bitcoin. Además, se filtraron correos electrónicos y correspondencia con el abogado de Wright que hacían referencia a un “libro mayor distribuido P2P”.
Además, transcripciones filtradas de reuniones con abogados y funcionarios de Hacienda le citaban diciendo: “Hice todo lo posible para tratar de ocultar el hecho de que he estado manejando Bitcoin desde 2009. Al final, creo que medio mundo se va a enterar”.
Pero no nos apresuremos a sacar conclusiones, puesto que Wright ha cosechado fama en el ecosistema, y no precisamente por ser Satoshi Nakamoto, sino todo lo contrario. A Wright se le acusa de charlatán y prepotente debido a que muchas de sus afirmaciones han quedado múltiples veces en entredicho.
Por ejemplo, las entradas del blog dónde hablaba sobre cripto previo lanzamiento del libro blanco parecían estar fechadas con anterioridad. Las pruebas también sugerían que las claves de cifrado públicas vinculadas a Satoshi Nakamoto también estaban fechadas con anterioridad. Incluso, el cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, que por lo demás es reticente a la política en el mundo de las criptomoneda, salió en contra de Wright, llamándole públicamente fraude.
Wright, imperturbable ante las críticas, ha aprovechado la atención mediática para labrarse un papel destacado dentro de la comunidad criptográfica. Dirigió una polémica bifurcación de Bitcoin, luego una aún más polémica de Bitcoin Cash, formando Bitcoin SV. También es el director científico de nChain, una empresa de soluciones blockchain que presta servicios a clientes empresariales.
Wright sigue envuelto en una serie de enredos legales desde 2016. El ingeniero australiano intentó desde registrar patentes de Bitcoin, probablemente con el objetivo de apropiarse de la tecnología. También intentó que un tribunal le adjudicara la autoría del White Paper, sin éxito.
Si Wright realmente tiene relación con la creación de Bitcoin, el desarrollo de la criptomoneda se lo debería en gran medida (o completamente) a Dave Kleiman, socio de Wright y genio de la informática, según reseñan distintos medios.
Kleiman poseía un sinnúmero de diplomas y certificaciones en el área de la computación. Apareció en varias ocasiones en los canales CNN y ABC, y fue el coautor de varios libros relacionados a contraseñas seguras, amenazas de seguridad informática a empresas y software.
Según el medio Gizmodo, un correo electrónico parece mostrar a Wright pidiéndole ayuda a Kleiman con un documento meses antes de publicarlo. “Necesito tu ayuda para editar un documento que voy a publicar este año. He estado trabajando en una nueva forma de dinero electrónico, Bit-efectivo, Bitcoin”, dice el correo. “Tu siempre estás allí para mi, Dave. Quiero que seas parte de esto”.
Si bien es uno de los sospechosos con menor probabilidad de ser Satoshi Nakamoto, es indudable que Kleiman tenía los talentos y conocimientos necesarios para hacer algo así, además de la discreción para mantenerlo en secreto.
Otro de los documentos que parecen probar su relación con Bitcoin incluyen lo que parece ser un borrador de contrato en el que Wright le confiaba a Kleiman 1.1 millones de Bitcoins en el año 2011. Sin embargo, se estima que el dinero regresaría a las manos de Wright por completo debido.
Kleiman falleció trágicamente en el año 2013. Según fuentes cercanas a su familia, mantuvo siempre cerca de su persona una memoria USB de alta resistencia y durabilidad. Si Kleiman de verdad era el poseedor de una fortuna del tamaño de la que se estima posee Satoshi Nakamoto, es bastante probable que estuviera guardada allí.
Esta memoria supuestamente pasó a las manos del hermano de Kleiman, Ira, quien se ha negado múltiples veces a hablar de forma oficial con los medios de comunicación. Pero incluso si los Bitcoins estan allí, recuperarlos no sería algo tan sencillo. “Kleiman, el aficionado a la seguridad informática, guardaba todo lo que poseía bajo cifrados y diferentes medios de seguridad, y la calidad de protección era tan alta que incluso sus compañeros dudan poder superarla y acceder a sus archivos”, reza la redacción de Gizmodo.
En febrero de 2018, el hermano de Kleiman interpuso una demanda en contra de Wright por presunta usurpación de los bitcoins que Dave Kleiman había estado minando y que pasaron a manos de Wright al momento de su muerte, así como por derechos de propiedad intelectual, ya que Wright ha realizado varios intentos de patentar Bitcoin. En 2021 Wright ganó el juicio, pero tuvo que pagar 100 millones de dólares a los herederos por cambiar el nombre de la compañía que había creado con Kleiman.
Fuera de las polémicas, los tribunales y los focos se encuentra Adam Back, un criptógrafo e informático británico relacionado con el movimiento cypherpunk. Satoshi Nakamoto citó a Adam Back en el libro blanco de Bitcoin gracias al trabajo de Back en Hashcash, un sistema de prueba de trabajo diseñado como herramienta para combatir el correo basura y los ataques de denegación de servicio. Back también estuvo en contacto con Satoshi Nakamoto en 2008 y 2009, donde ambos hablaron de Hashcash.
Debido a la cita en el libro blanco de Bitcoin y a sus considerables conocimientos de criptografía e informática, Adam Back suele ser citado como candidato a Satoshi Nakamoto. Sin embargo, Back ha negado rotundamente ser el padre de la criptomoneda.
Back es el CEO de Blockstream, una de las empresas más destacadas del ecosistema Bitcoin. Uno de los productos más fascinantes de la empresa es Blockstream Satellite, que transmite la blockchain de Bitcoin a todo el mundo vía satélite. La empresa también desarrolla una implementación de Lightning Network llamada Core Lightning, y una cadena lateral de Bitcoin llamada Liquid Network.
Metaphorically "We are all Satoshi" but concretely I am not.
— Adam Back (@adam3us) May 26, 2020
“Metafóricamente ‘Todos somos Satoshi’, pero concretamente yo no lo soy”, respondió en un tweet de 2020 Adam Back.
Otro candidato con todas las papeletas para ganarse el título de Satoshi Nakamoto es Nick Szabo, ingeniero informático y pionero en el sector cripto. Se le atribuye ser el pionero del concepto de contratos inteligentes en un artículo de 1996, lo que lo convertiría en, sino el padre de Bitcoin, al menos abuelo.
De la misma forma, en 2008, conceptualizó una moneda descentralizada a la que llamó Bit Gold, precursora del bitcoin. Describió Bit Gold como “un protocolo por el que se podrían crear en línea bits infalsificables y costosos con una dependencia mínima de terceros de confianza”. Esto es similar al concepto de bitcoin, por el que una serie de bits creados por una red de ordenadores sin un líder verifican y validan las transacciones.
El autor Dominic Frisby defiende que Nick Szabo es Satoshi Nakamoto en su libro ‘Bitcoin: ¿El futuro del dinero?’. Frisby consultó a un experto en estilometría que concluyó que el estilo de escritura de Szabo era similar a los escritos conocidos de Satoshi. Otra pista es que tanto Szabo como Satoshi hacen referencia al economista Carl Menger. Además, Frisby se enteró de que Szabo había trabajado para DigiCash, uno de los primeros intentos de llevar la criptografía a los pagos digitales.
Szabo también es un fanático de la seguridad; se desconoce tanto de su vida como de Satoshi Nakamoto. De hecho, solía usar seudónimos en 1990 y fue uno de los primeros partidarios de Bitcoin, lo que lo coloca junto a Wright y Kleiman en la carrera por la autoría de Bitcoin.
Sin embargo, Nick Szabo evita todo tipo de competencia en esta materia, pues niega rotundamente ser Satoshi Nakamoto, y apunta a tan solo seguirla. En 2011 afirmó al respecto: “Yo, Wei Dai y Hal Finney éramos las únicas personas que conozco a quienes les gustó la idea (o en el caso de Dai, su idea relacionada) lo suficiente como para perseguirla de forma significativa hasta Nakamoto (asumiendo que Nakamoto no es realmente Finney o Dai)”.
Ahora bien, ¿Quién es el Wei Dai al que Szabo se refiere como la posible verdadera identidad de Satoshi Nakamoto?
Se trata de un ingeniero computacional de origen chino que trabajó, entre otros, para Microsoft, donde diseñó implementaciones de cifrado para aplicaciones. En este sentido, Wei Dai ha hecho múltiples aportes al campo de la criptografía.
De hecho, su nombre aparece en Libro Blanco de Bitcoin, pues es el creador del “b-money”, predecesor de la primera criptomoneda y que se usó como referencia para su diseño, y que nunca fue implementada.
El “b-money” buscaba crear un “sistema de efectivo electrónico distribuido y anónimo”. Wei Dai propuso b-money en 1998, diez años antes de que apareciera Bitcoin, a través de una lista de correos conocida.
Entre sus posibles mecanismos de funcionamiento se describía una forma de ejecutar la minería. Sin embargo, en ese entonces el proyecto solo ofrecía una solución muy difícil de ejecutar en una red distribuida.
Wei Dai fue una de las dos primeras personas en ser contactadas por Nakamoto mientras este desarrollaba Bitcoin en 2008, lista a la cual se suma el anteriormente mencionado Adam Back.
No obstante, Dai no sólo ha negado ser Satoshi, sino que considera que este ni siquiera leyó bien sobre su propuesta antes de reinventarla por sí mismo: “Entiendo que el creador de Bitcoin, que se conoce con el nombre de Satoshi Nakamoto, ni siquiera leyó mi artículo antes de reinventar la idea él mismo. Él se enteró después y me acreditó en su documento. Entonces mi conexión con el proyecto es bastante limitada”.
Aunque pueda sonar como un delirio, no son pocos los que creen que la verdadera identidad de Satoshi Nakamoto era nada más y nada menos que el empresario, diseñador industrial, magnate empresarial, propietario de medios e inversor estadounidense Steve Jobs.
El fundador de Apple, aunque con mucha evidencia en contra, cierra esta lista como candidato estrella entre las posibles identidades de Satoshi Nakamoto. Esto se debe a un manifiesto descubierto en una vieja Mac que ‘confirmaría el alter ego de Jobs’.
Un post del tecnólogo Andy Bost cuenta que el experto se contró con una copia del libro blanco de bitcoin de Satoshi Nakamoto en una Mac.
Bost habló del hallazgo del manifiesto fundacional: “Mientras intentaba arreglar mi impresora, descubrí que una copia en PDF del libro blanco de bitcoin de Satoshi Nakamoto aparentemente se envió con cada copia de macOS desde Mojave en 2018″.
Esta revelación provocó que muchos usuarios de dispositivos Apple compartieran capturas de pantalla en las redes sociales del mismo manifiesto almacenado en sus Mac.
Aunque se trata de un hallazgo cuanto menos curioso, se trató de una campaña sensacionalista entre distintos medios de comunicación debido al debate que generó en Twitter. No existen evidencias contundentes que prueben su identidad, que justifiquen su participación en sistemas de pago basados en criptografía, o de que tan siquiera comparta visión filosófica con los escritos dejados por Satoshi Nakamoto.
Aunque no podamos determinar con exactitud la identidad de Satoshi Nakamoto en la actualidad, aún existen esperanzas para aquellos que continúan persiguiendo la verdad detrás este misterioso personaje. Lo indudable es el vasto legado que dejó tras de si esta importante figura del ecosistema.
La creación de Bitcoin marcó un inicio para la era de las criptomonedas, y cada poseedor de BTC es ahora en sí mismo una parte de Satoshi Nakamoto: “We are all Satoshi”.
La lista se extiende, aunque con poca evidencia, hacia el sociólogo económico finlandés Vili Lehdonvirta y el estudiante irlandés Michael Claro, pero ambos negaron las atribuciones. Neal Rey, Vladimir Oksman y Charles Bry también fueron señalados como posibles creadores de Bitcoin. Se ha especulado que el matemático japonés Shinichi Mochizuki podría ser Nakamoto, pero al parecer él negó tal afirmación. De la misma maneral, se encontró cierto vínculo entre Bitcoin y Ross Ulbritch, famoso por crear el mercado de la internet profunda Silk Road. En tiempos más recientes, se menciona al Premio Nobel de Economía John Forbes Nash, el magnate de la tecnología Elon Musk y al creador de BitTorrent Bram Cohen, sin demasiada evidencia al respecto.
Varios son los que han afirmado que Satoshi Nakamoto no puede tratarse de una sola persona. Se estima también que podría haber sido invención de un grupo de expertos relacionados al sector financiero; un equipo que incluía a Craig Wright, Dave Kleiman y Hal Finney; o una artimaña de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) o de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA). Casi a modo de broma, también se ha llegado a especular que Satoshi Nakamoto es un acrónimo conformado por las gigantes tecnológicas Samsung, Toshiba, Nakamichi y Motorola.
Es probable que la CIA y la NSA conozcan la identidad de Nakamoto. Durante junio de 2018, el periodista Daniel Oberhaus de Motherboard afirmó haber consultado sobre la identidad de Nakamoto a la CIA bajo la Ley por la Libertad de la Información (FOIA), que ofrece a cualquier ciudadano estadounidense el derecho de acceso a la información federal del gobierno. La respuesta de este organismo resultó ser bastante ambigua: “la solicitud ha sido rechazada, y la agencia afirma que no puede confirmar ni negar la existencia de los documentos solicitados”. Esta declaración de la CIA se conoce como “respuesta GLomar", y es utilizada por muchas agencias de seguridad para evitar divulgar información sobre investigaciones abiertas.
Es posible encontrar una estimación sobre la fortuna de Satoshi Nakamoto en los diferentes foros de Bitcoin. En base a esto, muchos calculan que posee cerca de 1,1 millones de BTC guardados en su billetera desde hace más de una década. A los precios actuales, Nakamoto acumularía más de 33.000 millones de dólares, una suma astronómica que lo catapultaría en la lista Forbes. Sin embargo, los BTC de Satoshi Nakamoto no se han movido desde su salida del ecosistema.
Al momento de la creación del BTC, la dificultad de minado era mucho más sencilla. Una computadora común y corriente tenía suficiente potencia para extraer varios miles de tokens al mes. En base a esto, se estima que Satoshi Nakamoto logró acumular una importante suma de criptomonedas en su corto periodo de actividad en la red.
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