Este jueves, la bolsa de criptomonedas Remitano se vio inmersa en una crisis de seguridad. Se retiraron sospechosamente más de 2,7 millones de dólares en varias monedas digitales. Tether actuó con rapidez y consiguió congelar 1,4 millones de dólares, protegiendo así una parte sustancial de los activos.
Detalles del atraco a Remitano
Alrededor de las 12:45 p.m., se activó una alerta cuando un monedero Remitano conocido comenzó a enviar fondos a una dirección desconocida. Las transacciones sospechosas comprendían 1,4 millones de dólares en Tether, 208.000 dólares en USD Coin y tokens ANKR valorados en 2.000 dólares en ese momento. En consecuencia, Cyvers, una plataforma de análisis de blockchain, emitió una alerta inmediata a la comunidad de criptomonedas.
Vínculos con Corea del Norte: Lazarus Group en el punto de mira
Además, Remitano, que se dirige a países en desarrollo como Ghana, Camboya e India, aún no ha emitido ningún anuncio formal sobre la brecha. Sin embargo, este no es el primer ciberataque de este tipo que se produce este año, con una serie de brechas en bolsas de criptomonedas en 2023 que han dejado al descubierto claves privadas y robos significativos.
Además, las autoridades estadounidenses atribuyen estas actividades maliciosas al grupo Lazarus, que se cree está conectado con el gobierno norcoreano. Además de Remitano, el grupo habría sustraído 41 millones de dólares de la plataforma de apuestas Stake y otros 27 millones de Coinex.
Además, se estima que la magnitud de los robos atribuidos al Grupo Lazarus, incluido el ataque a la plataforma Stake, ha recaudado más de 200 millones de dólares solo este año. La Oficina Federal de Investigación (FBI) ha instado a las criptoentidades a permanecer vigilantes y abstenerse de realizar transacciones vinculadas a direcciones marcadas asociadas con el grupo.
Aunque las monedas digitales ofrecen numerosas ventajas, la posibilidad de que se produzcan robos de gran valor sigue siendo preocupante. A medida que estos ataques se hacen más frecuentes, se subraya la importancia de contar con protocolos de seguridad robustos y contramedidas rápidas para proteger los activos de los inversores.