El mercado de criptomonedas está mostrando un claro rebote tras la publicación de los últimos datos del Índice de Precios al Productor (IPP) en Estados Unidos, los cuales indicaron una inflación más baja de lo esperado. El IPC anual de junio se situó en un 2,3%, por debajo del pronóstico del 2,5%, y la inflación mensual se mantuvo en 0,0%, favoreciendo el ambiente propicio para una posible bajada de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Esta es una noticia que cae bien en el mercado de criptomonedas.
Criptomonedas reaccionan a datos de la inflación
Como consecuencia, la capitalización total del mercado de criptomonedas aumentó cerca de un 2% hasta situarse en aproximadamente 3,75 billones de dólares, con Bitcoin liderando la subida tras alcanzar los 119,000 dólares. Otras monedas importantes también mostraron incrementos, como Ethereum cerca de los 3,200 dólares, y altcoins populares como XRP, Solana y Dogecoin, que subieron más de un 2% en sus respectivos valores.
Los datos subyacentes también aportaron señales alentadoras para los inversores: la inflación anual subyacente descendió a 2,6%, frente a un pronóstico de 2,7%, y la variación mensual fue nula, contra una expectativa del 0,2%. Estos indicadores fortalecen la expectativa de que la Fed podría relajar su política monetaria en el futuro próximo, inyectando liquidez adicional que suele impulsar los precios de los activos digitales.
El recorte de los tipos de interés debe esperar
No obstante, en la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) prevista para finales de julio, se descarta un recorte inmediato de tipos de interés, puesto que es probable que la Fed mantenga las tasas estables, con una probabilidad del 97,4% según información de CME FedWatch. Sin embargo, Bank of America proyecta que podrían implementarse dos reducciones en septiembre y octubre, lo que refleja un posible giro en la política monetaria hacia finales de año.
Por otro lado, algunos miembros de la Reserva Federal, como las presidentas Beth Hammack y Susan Collins, se muestran cautelosos y piden paciencia, argumentando que aún es necesario observar con más claridad el impacto de factores como los recientes aranceles aplicados por la administración Trump para confirmar si la inflación realmente está en desaceleración.
En síntesis, la disminución de la inflación reavivó el optimismo en el mercado de criptomonedas, pues abre la puerta a una posible flexibilización monetaria en el futuro cercano, lo que podría traducirse en un nuevo impulso para activos como Bitcoin y Ethereum, aunque con un horizonte incierto en cuanto a la velocidad y las fechas de los próximos movimientos de tasas por parte de la Fed.