La regulación de las criptomendas en México es una tarea difícil de lograr, y eso está preocupando constantemente a diversas plataformas y expertos que no quieren que ocurran incidentes como la caída del exchange FTX.
En ese sentido, las entidades pertenecientes a la industria cripto resaltan que existen bases sólidas en la Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera (Ley Fintech) con el fin de otorgar certeza a los usuarios, según lo indicado en el diario El Economista.
Al respecto, el socio fundador de la firma legal BlackBox, Víctor Aguirre, expresó que la Ley Fintech cuenta con mecanismos suficientes para que la autoridad supervise los fondos de los usuarios de dichas plataformas, en caso de que se encuentren reguladas.
“Sería imposible que un caso como esté hubiera ocurrido en una plataforma regulada en México, que cumpliera con las disposiciones que marca la Ley Fintech. En las fintech reguladas no se cuenta con una protección de seguro como el bancario. Sin embargo no tienen autorización para realizar operaciones con los fondos de los usuarios en el caso de las Instituciones de Fondo de Pago Electrónico (IFPE)”.
Cabe señalar que, en el capítulo segundo de la Ley Fintech, la autoridad definió las reglas para la operación de las IFPEs, la norma dicta que se debe asegurar la disponibilidad de los recursos depositados.
En la ley se puede leer lo siguiente:
“La institución de fondos de pago electrónico deberá estar en posibilidad de reembolsar al cliente respectivo, cuando este así lo solicite, la cantidad de moneda nacional o, en su caso, activos virtuales equivalentes al valor de los fondos de pago electrónico emitidos de que dicho Cliente disponga en los registros respectivos”.
México necesita la regulación de las criptos
Victor Aguirre también reveló que no existe un listado que se emita por Banxico en el que se incluyan las criptomonedas que estarían autorizadas para la operación. Un paso que es clave para regular la actividad relacionada con la operación de criptomonedas en México.
El listado de activos virtuales con los que pueden operar las fintech mexicanas les permitiría a las tecnológicas pedir autorización para manejarlos y por ende se someterían a la supervisión de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
Esto les brindaría vigilancia activa y darían certeza en el cumplimiento y en un caso como el de FTX, se percatarían rápidamente para sancionar.
Finalmente, Aguirre enfatiza que la demanda por la regulación y la estandarización de prácticas como las hizo pública la fintech, será una de las tendencias que se repetirán en el futuro y en el contexto en el que se presenten problemas de insolvencia dentro de México.
“La regulación se está pidiendo porque hay cierta preocupación por una consecuencia grave como las que hubo en plataformas extranjeras”, destacó el empresario.