Emergent Fidelity Technologies, una empresa cofundada por Sam Bankman-Fried, fundador y antiguo CEO del FTX junto al exejecutivo, Gary Wang, ha emitido este viernes, 3 de febrero, una solicitud de protección por bancarrota bajo el Capítulo 11 de la Ley de quiebras de Estados Unidos.
Las empresas de Sam Bankman-Fried van cayendo
Emergent Fidelity era la compañía que contaba con 56 millones de acciones de Robinhood Markets (HOOD), un activo que se volvió tema de conversación entre varias empresas por el valor que podría aportar a los acreedores de FTX, según información indicada por CoinDesk.
Las acciones también se comprometieron como garantía para BlockFi, la firma prestamista de criptomonedas que también se declaró en bancarrota y presentó su propio reclamo el año pasado.
Al respecto, Bankman-Fried argumentó que debía conservar el control de las acciones. Sin embargo, los funcionarios federales tomaron medidas para tomar el control de los activos en enero.
Esos 56 millones de acciones de Robinhood valen más de 600 millones de dólares al precio de cierre de hoy. Según datos de Bloomberg, el único otro activo propiedad de Emergent Fidelity era de 20,7 millones de dólares en efectivo.
Bankman-Fried es dueño del 90% de Emergent Fidelity, y Wang, confundador de FTX, tiene bajo su propiedad el 10 % restante.
No obstante, es necesario señalar que, la declaración de quiebra de Emergent Fidelity no se pudo obtener inmediatamente. Además, todavía no hay información sobre las deudas que está reclamando la empresa.